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El torneo tuvo lugar en la Universidad de Worcester desde el pasado domingo hasta ayer martes y jugaron Canadá, actual subcampeona paralímpica y con su principal estrella en sus filas, Patrick Anderson; Gran Bretaña, con sus combinados A y B, y España.
La selección española acudió con los 14 jugadores preseleccionados para Londres 2012 (entre paréntesis los equipos que han militado en la última temporada): Daniel Rodríguez, Jaume Llambi, Rafael Muiño, Alejandro Zarzuela e Ismael ‘Maki’ García (Fundosa ONCE); Fran Lara, Carlos Vera y Asier García (CID Casa Murcia Getafe); Bernabé Costas y David Mouriz (Aldasa Amfiv), Diego de Paz (Fundación Grupo Norte), Jesús Romero (Clínicas Rincón Amivel), Roberto Mena (BSR Las Palmas de Gran Canaria) y Agustín Alejos (Padova Millenium Basket, de Italia).
España perdió sus tres primeros partidos, dos contra Canadá y uno frente a Gran Bretaña A, y venció en los tres siguientes. Su línea fue ascendente y demostró que puede ser una selección muy competitiva en Londres 2012. Al igual que en compromisos preparatorios anteriores, concretamente en Varese (Italia) durante la Semana Santa contra Australia y ante Colombia a mediados de mayo en Madrid, el seleccionador español, Óscar Trigo, colocó en la cancha diferentes quintetos con el fin de despejar dudas para confeccionar el equipo definitivo que irá a Londres 2012.
De esta manera, todos los jugadores, salvo Alejandro Zarzuela y David Mouriz, descansaron algún partido, con especial mención a Diego de Paz, que se perdió los dos primeros encuentros y jugó simbólicamente 14 segundos en el último. Al ala-pívot sevillano le intervinieran quirúrgicamente en su mano derecha hace mes y medio. En líneas generales, cabe decir que España acusó durante el primer día de competición el cansancio del viaje, ya que la expedición nacional tardó casi 16 horas en llegar a Worcester. De esta forma, los pupilos de Trigo no demostraron estar a la altura de Canadá y de Gran Bretaña el pasado domingo, selecciones con las que perdió por 77-49 y 45-69. Sin embargo, el equipo nacional fue cogiendo la onda a medida que transcurría el torneo, de manera que, ya sin el peaje del largo viaje, el lunes perdió por la mañana contra Canadá por poca diferencia (59-66) y obligando al combinado norteamericano a colocar al final toda su artillería pesada. El lunes por la tarde ya tocó ganar, esta vez contra la Gran Bretaña de Simon Munn, Terry Bywater, John Pollock y compañía (43-58), merced a su fe en la victoria y a una buena actitud defensiva. Y el martes, España hizo pleno con dos triunfos, primero contra los británicos paralímpicos otra vez (49-45), con un final de partido excelente, y después contra la selección británica B (50-39), con un equipo español de segundas y terceras rotaciones en muchas ocasiones.