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BSR Valladolid:.

El Fundación Grupo Norte ha vuelto a la senda de la victoria después de hacer lo propio ante un Caja Vital Zuzenak que poco ha podido hacer por parar el juego de los vallisoletanos. Y es que la diferencia entre las dos plantillas es muy notable y los pucelanos, con prácticamente jugando todo el partido con los hombres menos habituales, ha endosado una diferencia de 26 puntos a los vitorianos.

 

Y es que de poco vale ganar a los vitorianos por un marcador más amplio viendo que, por desgracia para ellos, no estarán en el grupo que estará luchando por el título, por lo que el basket-average entre ambos equipos de poco vale. Además, el Zuzenak es un equipo caballeroso que siempre se comporta como lo que son: unos auténticos deportistas, no mereciéndose más despropósitos.

Pero, a pesar de todo, el partido había que disputarlo. Los hombres de De Castro y Fernández sabían del peligro que puede acaecer en este tipo de partidos, por lo que, desde el primer momento, salieron al parquet del Pilar Fernández Valderrama con su cinco inicial de gala, menos la brava Ruiz, que empezó el partido en el banquillo y dejó su puesto al zamorano Pérez que, con minutos, se va asentado en esta categoría tan dura y competitiva.

Desde los primeros compases del partido ya se vio lo que iba a ocurrir en los minutos que quedaban por jugar. Highcock retomaba sus viejas costumbres -corriendo, anotando, encestando desde la línea de triples- y Carrión se hacía fuerte dentro de la zona, acompañado del internacional mexicano Lalo Prieto, que pasó más tiempo en el banquillo que en la pista. El que prácticamente vio el partido en el banquillo fue Highcock, que al comienzo del segundo cuarto fue reservado por los técnicos locales, no volviendo a salir a la pista.

Con Prieto también en el banquillo hasta el último cuarto, el burgalés López, ‘Piti’, fue el encargado de anotar junto al joven inglés Bridge, que además ordenó el juego castellano hasta que fue suplido por Robles, también habitante durante muchos minutos del banquillo.

Aunque en las primeras acciones del juego del burgalés no estuvo muy acertado, poco a poco, fue ganado presencia en el juego vallisoletano, demostrando con sus puntos (16) y con su juego el porqué el Fundación Grupo Norte se fijó en él y le ofreció vestir la camiseta morada.

Por parte de los vascos, solo García, expulsado por cinco personales, y Gandía mostraban capacidad anotadora, aunque, posteriormente, fue Tottil el que se sumó al ataque vitoriano. Menos el tercer cuarto, donde aprovecharon los desajustes de los pucelanos y consiguieron acabar empatados el cuarto, el resto de los cuartos fueron claros para un Fundación Grupo Norte que visitará la semana próxima la complicadísima cancha del Amfiv de Vigo.

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