AMFIV:.

Después de un largo verano sin noticias sobre su futuro, la inminente conclusión de los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y la eliminación de la selección española en los cuartos de final ante Canadá han provocado que el Club Amfiv haya tenido que tomar una decisión sobre su futuro. La delicada situación económica generaba muchísimas dudas en la entidad presidida por Pablo Beiro, consciente del riesgo que supondría afrontar su décimo primera campaña consecutiva en la máxima categoría nacional del baloncesto en silla de ruedas, la División de Honor.

El conjunto vigués viene ya de reducir drásticamente -en un setenta por ciento- su presupuesto en las dos últimas temporadas pero, aún así, los números no cuadraban. Era necesario un nuevo ajuste ante la práctica imposibilidad de conseguir patrocinadores particulares y la enorme dificultad para percibir las ayudas de las instituciones públicas, que, además, también se han visto drásticamente reducidas. Por eso, sobre la mesa figuraba la posibilidad de poner punto y final a treinta años de historia y a un glorioso pasado reciente con tres subcampeonatos europeos y un subcampeonato de la Copa del Rey, deshaciendo el primer equipo para continuar únicamente con las escuelas deportivas.

Pero el innato afán de superación que caracteriza a un club como el Amfiv triunfó una vez más y la directiva viguesa adoptó la arriesgada decisión de salir a competir esta campaña, a pesar de que todavía falta por cubrir un cuarenta por ciento del presupuesto, que de nuevo se verá reducido a su mínima expresión. “No podíamos tirar por la borda el trabajo de treinta años y privar a los chicos de nuestras escuelas del modelo y la inspiración para seguir adelante que para ellos supone el primer equipo. En todo este tiempo desde la fundación del club, nunca hemos perdido de vista nuestro objetivo primordial que es buscar la integración del discapacitado a través del deporte. Contar con un equipo en la División de Honor nos aporta una visibilidad y nos da la posibilidad de llegar a un público al que, de otra forma, igual no conseguiríamos llegar”, explica el director deportivo del Amfiv, José Antonio Beiro, quien puntualiza que “además, también teníamos un compromiso moral con nuestros jugadores, con los jugadores de la casa, que estas últimas temporadas a pesar de la crisis y de los constantes recortes en el presupuesto han apostado por seguir aquí, muchas veces perdiendo dinero”.

De todas formas, Beiro es plenamente consciente del riesgo que va a correr la entidad esta campaña. “Está en juego el futuro del club. Hemos tomado la decisión de salir y lo hacemos sabiendo perfectamente que todavía tenemos que buscar y generar recursos para cubrir un cuarenta por ciento del presupuesto. Esperamos poder conseguir llenar ese vacío a través de las aportaciones de pequeños patrocinadores o mediante un sponsor principal, que bien podría ser Aldasa si finalmente decide continuar con nosotros una campaña más o cualquier otra empresa que quiera apostar por nuestro proyecto. Cualquier aportación será bienvenida porque, de lo contrario, sí que ésta va a ser la última temporada del Amfiv”.

PLANTILLA

Como tampoco es novedad en las últimas campañas, el conjunto vigués llega muy pero que muy tarde al mercado. Además, la enorme limitación económica que su mínimo presupuesto establece es otro punto a tener en cuenta. Por eso, los esfuerzos del director deportivo vigués se centran actualmente en asegurar la continuidad de los jugadores de la casa, los formados en las escuelas deportivas del Amfiv o que llevan defendiendo la camiseta del club durante la práctica totalidad de su carrera. En ese sentido, ya han iniciado las conversaciones y se confía en que se produzcan prontas novedades, a pesar de que en los casos de Bernabé Costas o David Mouriz, que se encuentran en Londres disputando los Juegos Paralímpicos con la selección española, se esperará a su regreso a Vigo la próxima semana para empezar a hablar.